viernes, 8 de agosto de 2008

La casa de Tía Cata...



Ayer la tía "Cata" como le decimos cariñosamente, se desmayó con frenesí frente a una vidriera de la casa más importante de modas, ubicada en pleno barrio oligarca porteño...

Al ver, olímpicamente, como unas vidrieristas se rascaban el culo como si nada.

Es que estaban exponiendo la última colección primavera-verano, en plena Avenida Alvear y a plena luz... dos hermosas desfachatadas muchachitas, que hasta ese momento -le había parecido así- sacaban y colocaban prendas de diversos diseños y colores, al tiempo que se reían como si nada...y jugueteaban sin medir consecuencias...

Tía Cata, -como se imaginarán- estaba espantada!!!! - No lo podía creer!!!

Quería llamar a la autoridad máxima en la materia "Educación Ética" y que castigara con crudeza aquella falta de respeto a la moral y las buenas costumbres...

En definitiva, terminó frente a la oficina del Odbusmmann de la ciudad Autónoma de Buenos Aires. Donde por cierto, la atendió una dama, elegante y perfumada, quien la recibía encantada...pero... con una minifalda que la indignó...

Cata a los gritos, dijo: "¡No puede ser, están todas locas!"...

Roja de vergüenza, la señorita... aún gentil, ...le preguntó en qué la podía ayudar?

-"En nada, en nada"..., pegó media vuelta sobre sus propios talones y huyó hacia la Casa Rosada.

Allí, unos galardonados jóvenes soldados serios, erguidos y uniformados... no le dirigieron nada, ni una palabra ni una mirada... eran estatuas...a lo que ya muy malhumorada comentó:

"¿Será qué en éste país de mierda todo anda como el culo?"....

1 comentario:

Rosana dijo...

Es espectacular...genial...será que en el fondo somos todos así?...Medio de esto...y medio de lo otro...
Está muy bueno.
Gracias.
María de la Provincia.